Hace poco, unos amigos italianos me regalaron un libro que me ha fascinado: La scattola dei calzini perduti, de Vauro Senesi. Es una de las tantas publicaciones de este polémico ilustrador italiano, conocido por las viñetas satíricas que publica en los principales periódicos italianos, como Il Corriere de la Sera. También ha publicado para El Jueves, y ha desatado varias polémicas en medios como la RAI, que en el 2009 le destituyó por publicar una viñeta sobre el terremoto de los Abruzzos.
El libro narra el día a día de Madut, un chico sudanés de la tribu dinka que, tras huir de la guerra, llega por casualidad a Roma acompañado por un grupo de misioneros. Perdido en un entorno que desconoce, la suerte le llevará hasta una lavanderia, donde pasa los días atendiendo a los clientes y guardando, como si de un ritual se tratase, los calcetines blancos que éstos se olvidan en una cajita que esconde como si fuera un tesoro. Los calcetines son para él el instrumento que le permite andar y huir de su condición de huérfano, de africano, de inmigrante ilegal. La fantasía y los recuerdos se mezclan en su quehacer diario, donde conoce otros inmigrantes y personas marginadas por la sociedad italiana como Hussein, un divertido vendedor paquistaní; Il Capitano, un vagabundo de origen francés; o Majok, la prostituta cuyo perfume le hace temblar.
Vauro viajó a los lugares de los que habla en el libro y conoció gente de la tribu dinka, de la cual dice "tiene una alegría casi mágica". Lo que más me ha gustado de la novela es que trata el tema de la inmigración sin dramatismos, aunque, retrata, a través de las pequeñas tragedias que vive Madut, la hipocresía de los italinos y la crueldad de su ley de inmigración.